La Bella y la Bestia: La sociedad del siglo XVIII

Por Alicia Vázquez

La Bella y la Bestia se desarrolla a mediados del siglo XVIII, durante los inicios de la Revolución Industrial. El padre de Bella es un inventor que vive con ella en las afueras de un poblado europeo, posiblemente perteneciente a la actual Suiza, y que no es socialmente aceptado por ser tomado como un loco al dedicarse a desarrollar inventos, una actividad mal vista para la época. La madre de Bella no aparece en la película ni se hace referencia a ella, pero en una adaptación más reciente (2017) se revela que murió durante una epidemia.

     La joven tampoco es aceptada en una sociedad que lo único que espera de las mujeres es sumisión, que cumplan con las labores del hogar y que aspiren a casarse, rol que va muy bien con el personaje de Gastón, un burgués egoísta y narcisista que no logra deslumbrarla y que se ve forzado a competir con la Bestia por su amor y para afianzar su imagen de protector y valiente frente a quienes se le han unido para matar al monarca.

     La protagonista es una mujer independiente, culta y sin anhelos de matrimonio, algo que no encaja con su tiempo. También representa a la sociedad ilustrada de la época que ya no quiere vivir sometida a un régimen monárquico, cuya representación es esa bestia que habita en un oscuro e inaccesible castillo y a quien todos le temen. El rey ya no es bien visto. Aunque después de una larga conquista, Bella termina cediendo a los “encantos” de la Bestia, quien la persuade dejándola entrar a su enorme biblioteca y ofreciéndole una cena que culmina con un vals. Recordemos que este baile surgió a la par de la Revolución Industrial y que los temas eran realizados por compositores leales a la monarquía. También fue exclusivo de la nobleza, circulo al que pronto entraría Bella.

     Otro de los detalles que llaman la atención es la personalidad de los objetos encantados del palacio, quienes no se apegan al modelo de familia que dicta la sociedad. Din Don, el mayordomo, es un hombre de edad madura que no tiene pareja en la película y que se mantiene fiel a su amo, a quien constantemente ayuda a recuperar la confianza cuando se siente inseguro, especialmente frente a Bella. El traje que Din Don lleva al defender el castillo de la invasión de los aldeanos recuerda a Napoleón Bonaparte.

     La señora Potts es el ama de llaves del castillo y madre de varios niños, aunque el más destacado es la tacita Chip. En la novela, la señora Potts tiene un esposo que muere antes del encantamiento del castillo, en la adaptación para el cine el padre de los niños es una figura que simplemente se omite.

     En ambos casos, podría decirse que la forma en que los dos son representados para las masas y la niñez de los años noventa es un nuevo modelo de familia que ya no está representada por padre, madre e hijo (s), en el caso de la señora Potts; y en el de Din Don, la soltería es algo normal y que no es mal visto.

Referencias:

“Din Don”, Disney Wiki. . [Consulta: 29 de Agosto de 2018].

“Sra. Potts”, Disney Wiki. . [Consulta: 29 de Agosto de 2018].